¿Qué
pasa cuando compras sandía y no está muy dulce?... podemos hacer infinidad de
zumos y batidos para aprovecharla. Una solución muy buena, sana, fácil, rápida
y refrescante para tomar a media tarde.
¿Os
apetece un vaso fresquito en una piscina como esta?
Hostal Cala Molí, en Ibiza
INGREDIENTES
-Sandía
sin pepitas (1/2 sandía)
-Manzanas
(yo he utilizado 2 golden que son las que tenía en casa)
-Leche
(300 ml.)
-Azúcar
moreno (3 cucharadas)
-Menta
PREPARACIÓN
Antes
de nada, ponemos a cocer la leche, con el azúcar moreno y unas ramitas de
menta.
Dejamos
enfriar un poco, colamos y metemos en la nevera para que se refresque.
Partimos
la sandía y la manzana y las pasamos por la minipimer.
Unimos
la leche, endulzada con el azúcar moreno y con el sabor de la menta.
Batimos
otro poco para que se mezclen bien los ingredientes y volvemos a meter en la
nevera, al menos un par de horitas para que se enfríe lo bastante.
Hacemos
bolitas con la sandía restante para cuando sea el momento, adornar y acompañar.
El
batido queda espeso, si queremos que sea más líquido solo hay que echar más
leche o pasarlo por un chino, para que la pulpa de la fruta se quede ahí, pero
en casa nos gusta, así, espesito.
Espero
que os guste porque el toque de la menta en la leche, lo hace muy refrescante.